Edificios mal aislados

Casi todos tenemos hoy día una cámara de fotos. La llevamos a diario  en nuestro móvil.

Lo que no es tan habitual es tener una cámara termográfica que mida la temperatura en la superficie de diferentes materiales.

Es esta una forma de saber que materiales de un edificio son menos aislantes y por lo tanto pierden energía. Si por ejemplo, en una vivienda tenemos en su interior una temperatura de 22ºC y fuera en la calle una temperatura inferior, la temperatura de dentro hará que los materiales menos aislantes de la fachada tengan también por fuera una temperatura más elevada. Por eso una cámara termográfica detecta esta temperatura y nos la representa con una fotografía en colores.

En el caso de las ventanas, si estas no son aislantes, serán un punto débil de la fachada y por eso, como se ve en la fotografía tendrán una temperatura exterior más elevada. Por eso, debemos poner ventanas aislantes, de tal forma que separen la temperatura exterior de la vivienda de la temperatura interio.  Ventanas que nos eviten estas pérdidas y ahorren energía.

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