Estamos ya en primavera y hay quien dice que es la estación más bonita del año. Ni frío, ni calor y los campos florecen. Sin duda una bella estampa la mayoría de lugares de nuestro país.
Si bien, hay cada vez más personas que la primavera no les sienta nada bien porque está muy relacionada con la llegada de las alergias. Cada vez las alergias afectan a una mayor parte de la población y sobre todo a los más pequeños. Con la llegada de la primavera, muchas plantas comienzan la polinización y con esto la aparición de muchos síntomas alérgicos. Por eso lo más recomendable es evitar respirar el polen.
Una de las medidas recomendadas por los expertos para minimizar sus efectos, es evitar salir a la calle sobre todo cuando los niveles de polen son mayores. Se suele decir que las horas prohibidas para salir son entre la 5 y las 10 de la mañana y las 7 y 10 de la noche.
Y no es suficiente solo con estar en casa para estar protegido. Debemos evitar que el polen entre en nuestro hogar y es aquí es donde tenemos que contar con nuestras aliadas las ventanas. Unas ventanas con un cierre totalmente hermético ayudarán a evitar que el polen entre en nuestro hogar. Especialmente el polen se transporta al interior de los hogares con más facilidad cuando hay fuertes vientos. Es aquí donde unas ventanas con una alta clasificación de impermeabilidad al aire nos darán la protección que necesitan los alérgicos.
En OnVentanas, todas las tipologías de ventanas fabricadas han sido ensayadas en cuanto a su permeabilidad al aire, obteniéndose valores en los sistemas practicables de Clase 4, que es la clasificación más elevada.
Y para ventilar la casa nos preguntaremos, ¿cómo hacemos? Los días de alta concentración de polen puede ser recomendable no ventilar. Tenemos información que fácilmente podemos encontrar en Internet sobre días y horarios de máxima concentración de polen según zona. Normalmente los niveles más bajos de partículas de polen se dan al mediodía, por lo que debemos aprovechar ese tiempo para abrir las ventanas y ventilar. También la lluvia hace que los niveles de polen caigan en picado, por lo que es otro momento en el que podemos aprovechar para ventilar. Ya hemos dicho muchas veces que diez minutos es más que suficiente para una correcta ventilación. Si es posible aprovechar la ocasión para ventilar cuando la persona alérgica no esté en casa.
Unas ventanas de baja calidad, sobre todo si son correderas, nos producirán filtraciones de aire al interior y este aire arrastrará las partículas de polen. Por eso, unas ventanas practicables oscilobatientes con una buena clasificación de impermeabilidad al aire son un aliado imprescindible para los alérgicos. También es posible instalar filtros de aire anti polen en las ventanas para permitir que el aire en la ventilación pase filtrado libre de partículas.
Esperamos haberos ayudado a disfrutar de una primavera más saludable.
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